viernes, 10 de junio de 2011

Mi historia en la fotografia (III)

Tras los primeros meses de estudio y práctica me fui animando con los primeros resultados (nada espectaculares pero eran justo la motivación que necesitaba). Así que me lié la manta a la cabeza y vendí el 18-55 IS (que ni mucho menos es tan malo como se comenta) y compré un gran objetivo, el Canon 15-85.



La compra de una lente que igualaba en valor a mi cámara, al margen de ser un serio gasto, indicaba que ya empezaba a tomarme más en serio mi implicación con la fotografía ... y por supuesto comenzaba a disfrutar mucho más.

También me hice con un grip que mejoraba la ergonomía de la 500D (un poco pequeña para mis manazas) a la vez que me proporcionaba mayor autonomía al llevar dos baterías.


Y así, poco a poco fui aprovechando mi poco tiempo libre y algunas escapadas de fin de semana para seguir aprendiendo y practicando hasta que llegó una segunda piedra de toque: un viaje de 10 días a Egipto el pasado mes de Enero, un país que ya me anticiparon que era tremendamente fotografiable ... y doy fe de ello.

Así me llegó el primer evento que tuve la oportunidad de fotografiar, un obra del grupo de teatro de mi novia, que la verdad no quedó del todo mal. De hecho me han vuelto a pedir que les haga fotos en un par de ocasiones más. Esto me ha venido bien para ir cogiendo soltura con el flash de mano.


Llegados a este punto me inscribí en un curso de nivel medio para miembros de Canonistas. Fueron tres días de curso teórico y práctico que me permitió aprender mucho tanto de la profesora como de los compañeros (con algunos de ellos aún mantengo el contacto). Una grandísima experiencia. (...continuará)

No hay comentarios:

Publicar un comentario