martes, 31 de enero de 2012

Hacer fotos ¿solo o acompañado?

Difícil pregunta que, como otras muchas, no tiene una sola respuesta. Y es que son muchos los factores que pueden hacer más o menos necesario o aconsejable una cosa u otra.

En primer lugar me gusta tomar la fotografía como una forma de expresión personal y como tal es más fácil ganar el nivel de relajación y concentración necesario si vamos a hacer fotos solos y a nuestro propio ritmo.

Haciendo turismo o un paseo al campo, todos los fotógrafos, profesionales o aficionados, hemos tenido que sufrir las prisas y la impaciencia, muchas veces comprensibles, de nuestros acompañantes que ven la fotografía como una actividad de "apuntar y disparar", y es que es muy difícil hacer entender a los no aficionados que uno de las principales placeres de un paseo o visita fotográfica es precisamente que el ritmo te lo marcan tus ganas de hacer fotos que además te invitan a concentrarte en todos esos detalles que hacen que descubras y disfrutes, más si cabe, del entorno que visitas.

Incluso yendo con otros fotógrafos el diferente ritmo e interés por unos u otros temas puede ser un problema que nos frene en un momento tan personal.

En cualquier caso poder compartir con otros el tiempo que dedicas a una pasión como la fotografía es siempre muy gratificante e incluso nos puede servir de motivación y fuente de ideas para futuras trabajos.

Por eso pienso que buscar un punto intermedio puede ser muy buena solución para este dilema. Quedar con otros fotógrafos para chalar y preparar la salida fotográfica dando luego tiempo suficiente para que cada uno vaya de "caza" a su propio ritmo y con sus propios objetivos es una gran idea, más aún si podemos luego compartir y opinar de nuestros resultados y experiencias durante el proceso.

Otra variante puede ser acompañar a un fotógrafo más experimentado para poder observar y aprender de su forma de trabajar, os garantizo que siempre es una grata y enriquecedora experiencia. El ejemplo más claro de esto es el trabajo en plató o en localizaciones donde cualquier fotógrafo agradece tener a gente que le ayude con el equipo y la iluminación.

Como veis, mi opinión acerca de la fotografía es que hay que tomarla como algo muy personal (casi íntimo) pero en absoluto tiene por qué ser siempre una actividad solitaria.

Y a vosotros ¿qué os parece?

miércoles, 25 de enero de 2012

De tarjetas de memoria

Una de las piezas de hardware a la que pienso que no se le presta la debida atención en fotografía son las tarjetas de almacenamiento, responsables, nada menos, que de guardar y preservar el resultado de nuestro trabajo.

En la fotografía actual se usan principalmente dos formatos de tarjetas de almacenamiento, las Secure Digital o SD y las Compact Flash. Las primeras debido a sus limitaciones en velocidad y a su menor precio están más enfocadas a un tipo de cámaras más amateur, aunque ya van saliendo versiones bastante mejoradas por lo que muchas cámaras nuevas admiten ambos tipos de tarjetas. mi Canon 500D usa este tipo de tarjetas SD.

My Flash Memory Card Collection

Hoy voy a centrarme en las tarjetas CF o Compact Flash que son las más utilizadas en cámaras más avanzadas y profesionales. mi 50D, una cámara prosumer o de "usuario con aspiraciones" es una de las que utiliza tarjetas CF.

Como os he comentado es muy aconsejable prestarle a las tarjetas la debida atención atendiendo especialmente a tres parámetros que debemos tener en cuenta a la hora de elegirlas.

CAPACIDAD.- En la actualidad, a medida que aumenta la resolución de los sensores, aumentan el tamaño de los archivos, especialmente si disparamos en formato RAW, por ello el tamaño de las tarjetas debe ir en consonancia con el espacio que se va necesitando para afrontar nuestro trabajo.

Aunque en la actualidad tenemos de forma habitual tarjetas CF de hasta 32GB llegando algunas hasta los 128 ó 256GB; personalmente, si no se va a hacer vídeo, soy más amigo de usar tarjetas de tamaño medio y llevar dos o tres encima para poder intercambiarlas y no arriesgarme a perder todas mis fotos por "poner todos los huevos en la misma cesta".

En mi caso tengo una CF de 4GB, tres de 8GB y acabo de adquirir una de 16GB. Mis cámaras de de 15 megapíxeles permiten almacenar unas 45 fotos por cada GB.

VELOCIDAD.- El parámetro rey de las tarjetas y que es hacia donde van los avances en tarjetas es la velocidad de escritura, verdadero cuello de botella a la hora de disparar ráfagas, o vídeo.

En las tarjetas SD la velocidad se explica de forma sencilla según la "clase" con la que aparezcan definidas: así clase 2 nos ofrecen 2MB/s, clase 4, 4MB/s y así hasta clase 10 (10MB/s). Estas son las velocidades más habituales, aunque ya se pueden encontrar tarjetas de clase 60 (60MB/s) ... mejor no hablar de los precios de estas últimas.

La velocidad en las Compact Flash es bastante mejor (aunque el tamaño físico es también mayor). Los tipos más frecuentes son:

66x = 10 mb/s = similar a clase 10 en SD
133x = 20 mb/s
200x = 30 mb/s
266x = 40 mb/s
333x = 50 mb/s
400x = 60 mb/s = similar a clase 60 en SD
466x = 80 mb/s
533x = 82 mb/s
600x = 90 mb/s

Por supuesto las velocidades son orientativas pocas veces exactas (dependen de cómo haya realizado las pruebas el fabricante) pero nos dan una idea bastante aproximada de lo que podemos esperar de la tarjeta que elijamos. Personalmente recomiendo usar tarjetas de más de 200x con lo que nos garantizamos un rendimiento bueno para la mayoría de los casos. Aunque, por supuesto, si lo nuestro es el vídeo o la foto de naturaleza o deportes que requieren disparo en ráfagas, deberíamos ir a por las de velocidad superior (400x o más).

New Twins and Old Memory

FIABILIDAD / DURABILIDAD.- Es decir, la confianza que podamos obtener de la tarjeta que escojamos para guardar esas fotos que tanto trabajo nos han costado conseguir. Aquí la marca y la garantía que esta nos dé es siempre muy importante. No voy a recomendar marcas concretas pero es mejor huir de empresas desconocidas y precios demasiado bajos. Recordad "lo barato sale caro".

Por último es importante tener cuidado a la hora de elegir un lector de tarjetas adecuado y de confianza para asegurarnos el traspaso de la información a nuestro ordenador sin depender de la cámara. Mejor asegurar con un lector que nos garantice que no vaya a fallar destrozando nuestras tarjetas y las fotos.

lunes, 23 de enero de 2012

Descartar fotos

Uno de los momentos más "dolorosos" a los que tengo que enfrentarme como fotógrafo novato es el de seleccionar las imágenes que voy a procesar para publicar o presentar.

Inicialmente a todos nos asalta esa tendencia propia del mismísimo Diógenes de "no tirar nada que igual me vale en el futuro". Dicha tendencia no es más que una consecuencia directa de nuestra propia inseguridad en la valoración y calidad de nuestro trabajo.

Free us, and we will dance (channel 4, deal 3, Contractor's discard invokes 10th initiation of the Ultimate Saga)

Mantener un excesivo número de fotos tiene un serie de problemas asociados que no dicen mucho de nuestro buen hacer como fotógrafos:

- Nos da más trabajo a la hora de procesar las fotos. Un raw sin procesar no es una foto terminada y debemos invertir tiempo en nuestras imágenes, pero tampoco debemos perder ese tiempo en procesar demasiadas fotos que no aportan nada a nuestro trabajo.

- Demasiadas fotos cansan y distraen al posible espectador. Menos es más también en este caso.

- Aumenta la posibilidad de que se nos cuelen "pufos" lo que nos dejaran mal y darán una mala imagen de nosotros; una mala imagen pesará mucho más en nuestro "debe" que una buena fotografía.

- El catalogado, archivado y almacenamiento de las fotos se complica de forma exponencial.

Childhood pictures

Ante tantos problemas derivados me permito recomendar ciertos consejos y estrategias que yo mismo me esfuerzo (de momento con éxito limitado) en usar para optimizar mi tiempo y los resultados que presento:

- El primer filtro es a la hora de pulsar el disparador. En la época digital se nos ha inculcado la errónea creencia de que "hacer fotos es gratis"; vosotros no sé pero mi tiempo no es gratis así que prefiero pensar algo más antes de hacer una foto pero, por supuesto, hay que ser lo bastante flexible a la hora de aplicar esta regla como para no arriesgarnos a perder algún "instante decisivo" como diría Cartier-Bresson.

- Cada foto de una sesión o trabajo debe aportar algo único al conjunto. Repetir imágenes o escenas o ser demasiado reiterativos con un motivo no dice mucho de nuestra originalidad ni capacidad de observación.

- Debemos acostumbrarnos a comparar grupos de varias imágenes similares y quedarnos con aquellas que de verdad merezcan la pena.

- A medida que mejoremos nuestra práctica y nuestra técnica nos iremos volviendo más exigentes con la calidad de nuestras fotos lo que nos hará menos doloroso el hecho de hacer descartes.

- Tras haber seleccionado y procesado un grupo de fotos podemos, como último paso, decidir qué fotos escogemos para presentar a un público determinado. El ejemplo más claro es el del book o portfolio del fotógrafo en el que se aconseja no incluir más de 30 imágenes.

En definitiva, como en tantas otras cosas, en fotografía "menos es más" ... yo intento aplicarme el cuento (a ver si poco a poco lo voy logrando).

viernes, 20 de enero de 2012

Viajando ligero y solo con dos lentes fijas

Como ya os mencioné, el viaje a Cantabria que acabo de comentar en mis anteriores posts no era únicamente fotográfico por lo que quise experimentar llevando poco peso (aún sentía el dolor de cuello de cuatro días en Praga cargando con la 50D y mis objetivos más pesados).

Así pues opté por la 500D que, lejos de ser reemplazada por la 50D, se ha convertido en un ideal complemento para salidas y escapadas ocasionales. La 50D la reservo para trabajo en estudio y trabajo y prácticas de la escuela de fotografía. El poco peso de la 500D (casi la mitad que la 50D) sería aún menos acusado gracias a llevar la correa BlackRapid RS-7.

Black Rapid RS W1

Respecto a las lentes, decidí dejar el 10-22 que tan bien se portó en Praga y lo reemplacé por el 28mm f2.8, una lente fija bastante económica pero con una buena calidad que, gracias a su focal que en APS-C se aproxima a un rango "normal" (son unos 45mm) me permitiría cumplir con la mayor parte de las fotos.

Como complemento opté por el 85mm f1.8 para tener una focal más larga y poder usarla en retratos, detalles y planos alejados. No pensaba usarlo demasiado pero al final apareció en el 25-30% de las tomas y con una gran calidad por supuesto.

Al usar de forma principal el 28mm no cambié demasiado de objetivo aunque, al tratarse de lentes poco voluminosas, el proceso era bastante sencillo y rápido.

LowePro Passport Sling

El equipo lo completé con mi ligera bolsa (Lowepro Passport Sling), el trípode GorillaPod (importante para salvar fotos al atardecer y por la noche) y un filtro polarizador Tiffen para el 28mm que tenía bastante abandonado y que me ha dado un gran resultado. Así que pude ir bastente preparado con apenas dos kilos de material.

Como ya habéis visto en los anteriores posts, los resultados no desmerecen en absoluto a los obtenidos con un equipamiento "mayor". Supongo que eso significa que puedo ir más ligero en mis viajes y que aún puedo y debo sacar más partido a mi equipo más "aparatoso" ... y es que de todo se aprende.

jueves, 19 de enero de 2012

Santillana del Mar y Comillas

Tras la fantástica jornada anterior, este día decidí ir a visitar dos localidades cántabras de excepción: Santillana del Mar y Comillas.

_MG_7649

_MG_7658

La visita a Santillana del Mar no es demasiado larga (no visitando Altamira, claro). Se trata de una encantadora población muy bien conservada en la que solo necesitas dos o tres horas para disfrutar de sus casas, calles empedradas y si colegiata.

_MG_7672

_MG_7668

Al llegar bastante temprano pude tener una luz bastante buena, lo que unido al despejado cielo azul resaltaba aún más los colores de la piedra de los edificios.

_MG_7698

_MG_7707

Además, poder pasear con tranquilidad por esas calles sin apenas gente hacían mucho más entrañable la visita.

_MG_7719

_MG_7743

Hacia el mediodía llegué a Comillas, una encantadora localidad costera en la que pude disfrutar de su playa y sus barrancos, junto con algunos edificios y lugares interesantes.

_MG_7730

_MG_7781

Entre estos lugares interesantes me gustaría destacar el cementerio y la universidad que merecen la pena de ser visitados, al menos en su exterior, ya que proporcionan fotografías de gran interés.

_MG_7783

_MG_7786

Este segundo día, por supuesto, no fue tan extraordinario como el anterior en Santander, pero sin lugar a dudas resultó tremendamente productivo fotográficamente hablando.

_MG_7754

_MG_7798

Cantabria, un lugar que no por ya conocido, nos deja de sorprender. Habrá que volver.

miércoles, 18 de enero de 2012

¿Pasarme ya a full frame?

A medida que uno va avanzando en fotografía y va conociendo, técnica, estilos, fotógrafos, etc, le van surgiendo una serie de inquietudes, curiosidad y "necesidad" de ampliar/mejorar el equipo del que disponemos.

Ya en su momento os hablé de la mejor forma de acercarnos a la elección y compra de nuevos objetivos, y también de mi compra de la 50D, una cámara de mayores prestaciones que mi inicial 500D (aunque hayamos visto que, realmente, no hay tanta diferencia).

En este caso la duda surge a la hora de decidir si doy el "salto definitivo" de mis cámaras APS-C (con un sensor de un tamaño más reducido) a una full frame con una serie de ventajas en calidad y prestaciones sobre mi equipo actual que están fuera de toda duda.

Full Frame Box Brownie Joy

El problema, como casi siempre, es principalmente económico; la Canon 5D Mark II que es el modelo que tengo en el punto de mira, viene saliendo por unos 1800€ (solo el cuerpo), un importante desembolso que hace que frene el "calentón" inicial.

Para tomar la decisión de dar ese importante paso debo se honesto conmigo mismo y plantearme si realmente lo necesito y hacer una lista de tres factores que, a mi juicio, aún no cumplo.

- Dinero. Afortunadamente hoy por hoy puedo permitirme gastar esa importante cantidad (especialmente teniendo en cuenta que vendería una de mis dos cámaras actuales y puede que algún objetivo) pero ¿puedo permitirme malgastarla?

- Objetivos necesarios. Aunque casi todos mis objetivos son perfectamente compatibles con sensores full frame (todos excepto el 10-22), el perder el factor de multiplicación haría necesario apuntar también la compra de un tele-zoom (un 70-200 es lo que tengo en vistas) con lo que más gastos se añadirían a esta "lista de la compra".

- ¿He aprendido lo bastante para haber sacado partido a mis cámaras actuales y hacer que me sea realmente productivo adquirir YA una 5DMK2? Aquí esta el quid de la cuestión. A pesar de que considero que estoy aprendiendo a buen ritmo (a pesar de no disponer de todo el tiempo que me gustaría), mis cámaras actuales me están dando bastantes satisfacciones y noto que aún me queda recorrido para considerar que las domino. Además la 500D aún no cumple dos años en mi poder, y la 50D aún no tiene un año en mis manos.

You Had Me at Full Frame Sensor...

Así pues mi decisión POR EL MOMENTO es templarme, ser prudente y seguir mejorando esperando a llegar a necesitar de verdad la full-frame. Puede que sean unos meses o puede que incuso más de un año. Además se prevé que este año salga a la venta la sucesora de la 5DMK2.

... A no ser que surja una buena oportunidad, pero claro, sin prisa ...

martes, 17 de enero de 2012

Santander

A principios del pasado mes de diciembre tuve la oportunidad de visitar Santander, una ciudad bastante conocida por mi pero que aún no había tenido la oportunidad de fotografiar como dios manda.

_MG_7412

_MG_7427

El primer día di un largo paseo comenzando, como no podría ser de otra manera, por la playa del Sardinero que, a pesar del frío, mostraba bastante actividad de paseantes, surferos, pescadores y curiosos (como yo mismo).

_MG_7479

_MG_7491

La luz era excelente gracias a un cielo nuboso que también daba origen a unas nubes muy interesantes que realzaban la fuerza del mar y los paisajes.

_MG_7488

_MG_7483

Me llamó la atención ver, en pleno mes de Diciembre, la playa con tanta vida así que noi me centré únicamente en fotografiar los espectaculares paisajes sino también a la gente y como interaccionaba en las imágenes con las que me iba encontrando.

_MG_7462

_MG_7475

Tras el Sardinero llegué a la playa del Camello donde la mar se embravecía ligeramente y las fotografías iban surgiendo ante mi cámara con una naturalidad y fuerza apasionantes.

_MG_7516

_MG_7510

Hablando del equipo, y dado que el viaje no era estrictamente fotográfico decidí ir ligero de equipaje llevando únicamente mi bolsa pequeña con la 500D y solo dos lentes fijas (el  28mm f2.8 y el 85mm f1.8), a lo que añadí el mini-trípode GorillaPod y un filtro polarizador circular Tiffen para el 28mm.

_MG_7555

_MG_7563

El filtro polarizador me dio mucho juego con las luces del atardecer que pude disfrutar desde el entorno del Palacio de la Magdalena.

_MG_7566

_MG_7578

La luz y las imágenes iban mejorando a cada momento y creo que pude disfrutar tanto de las fotografías que iba haciendo como del mero hecho de observar las "fotografías" que iban apareciendo por docenas ante mis ojos.

_MG_7599

_MG_7616

El punto culminante fue sin duda la hora azul donde hice varias tomas de la bahía gracias al gorillapod, un pequeño-gran trípode que nos puede sacar muy bien de este tipo de situaciones.

_MG_7597

_MG_7609

Continué mi jornada de caminata hacia el puerto de Santander donde llegué ya de noche pero aún así pude hacer algunas tomas con las que completé una muy divertida y productiva jornada.

 _MG_7632

_MG_7638


Os dejo con el total de las fotos de este día:

lunes, 16 de enero de 2012

Presentación del libro "Fotografía sin Verdad"

El pasado viernes en el marco de "Los viernes de EFTI" asistí en mi escuela de fotografía a la presentación del libro "Fotografía sin Verdad" de Diego y Daniel Carballo. Donde se habla de la manipulación en fotografía de prensa desde sus inicios hasta la actualidad.



Los autores, padre e hijo, además de doctores en periodismo, basaron sus respectivas tesis doctorales en este tema, el primero en la época analógica y el segundo en un plano más digital. Por ello la fusión de ambos trabajos nos da un enfoque global y muy completo que se plasma perfectamente en esta obra.

El libro fue presentado por el gran Enrique Meneses, toda una eminencia en el fotoperiodismo quien a sus 82 años no ha perdido ni un ápice de fuerza ni pasión por el mundo de la fotografía. Os invito a visitar su blog en el que hace 10 años que escribe; muy recomendable.



Don Enrique nos estuvo obsequiando con anécdotas y experiencias personales que ilustraban muy bien la temática de este libro que el mismo prologa.

Tras las conferencia que se cerró con un interesante debate, nos dirigimos a una de las salas de EFTI donde se inauguró una exposición con buena parte de las imágenes que ilustran el libro.



Tuve la oportunidad de hacerme con un ejemplar del libro que ambos autores y el prologuista tuvieron la amabilidad de dedicarme.

Aún no he tenido la oportunidad de ponerme con el libro pero os prometo que tendréis una puntual crítica del libro en este blog ... pero no pinta nada mal.

viernes, 13 de enero de 2012

Proyecto 24 horas

Como ya os comenté en mi post anterior, el pasado miércoles presenté en la tutoría dos proyectos: el de 6 fotos de paisajes y otro, este más personal, en el que debería contar con 10 fotos 24 horas y lo que pasa a mi alrededor.

_MG_7799

_MG_7803

Inicialmente pensé en hacerlo tomando fotos de una amiga, pero el descuadre de fechas y el periodo navideño hizo que me decidiera a hacerlo desde un punto de vista de primera persona.

_MG_7806

_MG_7810

Se trata de fotos que hice el pasado 3 de enero en Mérida mi ciudad natal donde estaba pasando unos días. En concreto quería contar un día tranquilo, aparentemente monótono, pero con momentos que se pueden disfrutar de forma intensa.

_MG_7823

_MG_7834

Quería enfatizar el punto de vista de primera persona, haciendo fotos íntimas donde no apareciera gente a excepción de algunas fotos donde aparezco yo mismo (o mejor dicho, partes de mi cuerpo) y objetos cercanos.

_MG_7840

_MG_7849

La intimidad y la primera persona definieron también el uso también del blanco y negro y la lente, mi 28mm f2.8 que con la conversión del factor de recorte de mi 500D (prefería usar esta cámara se convierten en casi 45mm, muy cercanos a una focal "normal" (con el ángulo de visión del ojo humano).

_MG_7857

_MG_7870

El resultado no ha sido demasido desastroso; mi tutor me ha dicho que he conseguido contar uan historia con un hilo conductor ... aunque, claro, había alguna foto que no le encajaba del todo.


Y es que consguir dejar a un lado la parte técnica para centrarme casi en exclusiva en contar una historia me ha parecido muy difícil e interesante a la vez y, la verdad, es que me voy convenciando que ese es el camino.