La ciudad de Tallin posee un bonito centro medieval que invita a callejear relajadamente. Al no ser una visita excesivamente larga decidimos ir por nuestra cuenta, y lo cierto es que fue una buena elección.
Yendo sin prisas pudimos ver todo lo principal en apenas cuatro horas, así que a primera hora de la tarde ya estábamos de vuelta en el barco.
Por la tarde aproveché para hacer unas fotos del barco, así como de algunos paisajes, y de gaviotas y albatros que nos siguieron al zarpar.
El día comenzó con nubes y claros y terminó con algo de lluvia, pero aún así pude hacer bastantes fotos. Decidí no utilizar el filtro polarizador, puesto que, aunque hacía sol, la mayoría de las calles medievales eran en sombra y no quería tener que andar poniendo y quitándolo.
Seguí utilizando el 15-85 en exclusiva con velocidades por encima de 1/125 y aperturas en torno al punto dulce (f5,6 - f8).
Al ir por nuestra cuenta tuve la oportunidad de fotografiar, no solo lugares turísticos, sino también lugareños y turistas que se me presentaban en situaciones curiosas.
También aproveché para hacer alguna panorámica desde uno de los miradores de la ciudad.
Las fotos en el barco tuvieron también su componente de fotografía callejera pero también con focales angulares para paisajes y localizaciones del barco.
Para fotografiar las gaviotas puse mi tele, el 55-250, con aperturas en el punto dulce y con velocidades por encima de 1/250. Puse el modo de enfoque AIservo y aproveché la ráfaga que me da la 50D. Lo cierto es que me lo pasé bomba y creo que conseguí algunas tomas interesantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario